12 consejos para fotografiar a través de ventanas

Muchas veces tenemos la oportunidad de realizar fotos bellísimas desde el interior de edificios. Tan solo tenemos que disparar nuestra cámara a través de un cristal… Sin embargo, puede resultar más complicado de lo que parece.

Si sigues estos sencillos consejos podrás conseguir buenas fotos a través de cristales de ventanas. Además, la mayoría también los podrás aplicar a ventanillas de vehículos o incluso de locales o escaparates de tiendas. ¡Toma nota de todos ellos!

El reto de fotografiar a través del cristal

Seguro que te ha pasado alguna vez. Estás de viaje y cuando subes hasta lo más alto de un edificio o monumento para realizar un fotografía panorámica de la ciudad a tus pies te encuentras con un cristal enorme que te impide conseguir la captura que tanto deseabas.

Los cristales suponen un reto para los fotógrafos por algunos contratiempos con lo que tendremos que aprender a lidiar. Los más comunes y molestos son: el deslumbramiento, las reflexiones y las refracciones.

En algunas ocasiones esos efectos que se crean en los cristales nos resultarán útiles si nuestra intención es puramente creativa. Sin embargo, si no nos interesa que aparezcan, existen trucos para poder evitar que arruinen nuestras fotos ¿Quieres saber cuáles son?

Este consejo, aunque obvio, no siempre será posible seguirlo. Normalmente, sobre todo en edificios de visitas controladas, todas las ventanas se encontrarán cerradas por motivos de seguridad, no estando permitido abrirlas.

En ese caso, no tenemos nada que hacer. Pero si se trata de una situación en la que se nos permite abrir la ventana, como en un pequeño hotel familiar, no te lo pienses ni un segundo. Abre la ventana y haz las fotos sin cristal. Te sobrarán el resto de los consejos.

2. Apaga el flash

Si has llegado a este punto, tienes un estupendo cristal entre la cámara y el exterior. Este cristal, la mayoría de las veces transparente, es tu mayor enemigo, y te puede dar algún que otro quebradero de cabeza.

Lo primero de todo, apaga el flash. Si eres un fotógrafo principiante, es posible que tengas el modo de disparo automático activado. Si esto es así, y la cámara considera que esas condiciones de luz son insuficientes, el flash se disparará.

Esto provocará dos cosas. La primera, garantizada, será un terrible reflejo de luz gracias al cual no se verá nada de lo que quieres sacar. Lo segundo (y más grave) es que te pueden retirar la cámara mientras dure tu visita si estás haciendo fotos en un lugar donde está prohibido el uso del flash.

3. Enfoca manualmente

Si intentas enfocar de forma automática a través de un cristal, lo más probable es que la cámara se confunda. Al detectar un objeto cercano no sabrá si enfocar a la ventana o al paisaje que hay detrás de ella. Si finalmente decide enfocar al cristal, la zona que te interesaba fotografiar quedará completamente borrosa.

La solución, tan simple como efectiva, es utilizar la opción de enfoque manual de la cámara y enfocar al infinito. Es bastante probable que tu máquina tenga este parámetro en algún menú o botón, aunque no sepas bien como activarlo si no lo has usado ninguna vez. Si es tu caso, revisa el manual de usuario de tu cámara.

4. Acércate al cristal

Si es un día soleado puede que haya un fuerte contraste con respecto a la luz del exterior. En función de la medición de la luz que haga tu cámara, pueden ocurrir que el fondo esté bien expuesto pero que se reflejen las siluetas de las personas que estén a tu lado (o la tuya). El truco para evitar esto es el de acercarte todo lo posible al cristal.

Así además de evitar el deslumbramiento y los reflejos de la ventana también evitaremos que aparezcan los defectos del propio cristal. Cuanto más te acerques a la ventana, más se desenfocará su superficie. Eso sí, ten en cuenta que si te apoyas directamente en la ventana pueden haber vibraciones o movimientos indeseados que afecten a la toma.

5. Elige ventanas de un solo vidrio

Si tienes la posibilidad de elegir entre unas u otras ventanas a la hora de hacer tus fotos, intenta que tengan un solo vidrio. Hoy en día las ventanas de muchos hoteles, lugares públicos o recintos privados, pueden tener cristales dobles o incluso triples para reforzar la seguridad.

El problema es que estos cristales extra producen un brillo adicional y multiplican los reflejos. Los consejos y trucos que te vamos a dar te servirán sobre todo para evitar los reflejos del cristal exterior pero los reflejos de los cristales internos será más complicado eliminarlos. Por lo que, si es posible, trata de evitar ese tipo de ventanas.

6. Limpia la ventana por dentro (y por fuera)

Se trata de un recurso obvio pero fácil de olvidar si vamos con prisas. Tómate un momento para inspeccionar la ventana en busca de arañazos, marcas y/o suciedad. Elige el área que menos castigada esté y dedica un momento a limpiarla con una gamuza (deberías llevar más de una encima para tus objetivos).

No hace falta que limpies toda la ventana, con que despejes la zona en la que colocarás la lente será suficiente. Si tienes la posibilidad de limpiarla también por fuera siempre ganarás más nitidez y reducirás el contraste. Aunque si te acercas al cristal y usas una profundidad de campo reducida la suciedad no debería ser un problema demasiado grave. Luego veremos por qué.

7. Evita la luz del sol directa

Cuando el Sol da de lleno sobre el cristal de una ventana no solo crea deslumbramiento sino que cualquier defecto se hará todavía más visible (como el polvo o los rasguños). Por lo tanto, si puedes evitar hacer fotos desde esa ventana cuando incida en ella la luz directa, mucho mejor.

Fíjate en cómo está orientada la ventana o analiza las horas de luz para saber cuándo estará en sombra esa zona para aprovechar y hacer tus fotos. Ten en cuenta también que a cierta hora se hará de noche y se encenderán luces en el exterior. Si están cerca de la ventana también podrían arruinar tus tomas si no las puedes apagar.

8. Usa una apertura de diafragma alta

Cuando fotografiamos un paisaje solemos usar una apertura pequeña para abarcar una mayor profundidad de campo. Sin embargo, cuando disparamos a través de una ventana, puede ser un buen truco hacer justo lo contrario, porque una escasa profundidad de campo minimiza los reflejos y los defectos en las ventanas.

Si nos colocamos muy cerca del cristal y enfocamos manualmente nos interesa usar grandes aperturas. Cuanto mayor sea esa apertura (menor sea el número f) más sencillo será disparar incluso a través de una rejilla o de una mosquitera sin que aparezcan en la imagen, si estamos completamente apoyados sobre esa superficie.

9. Dispara en paralelo al cristal

Cuanto más paralelamente dispares tu toma con respecto al cristal de la ventana, menor cantidad de reflejos obtendrás en tus imágenes. Por eso, un ángulo de 90º será el ideal para evitar la refracción que se puede producir si angulas más tu cámara.

Si decides no hacer tus fotos en paralelo al cristal, habrá más posibilidades de que se produzca un efecto prisma al rebotar la luz sobre el cristal y que aparezcan fantasmas o halos extraños en tus fotos. De hecho, cuanto más grueso sea el vidrio o más capas tenga, mayor será el riesgo.

10. Usa un filtro polarizador (aunque no siempre)

Una de las principales ventajas de un filtro polarizador es que es capaz de reducir los reflejos que se producen sobre prácticamente cualquier tipo de superficie reflectante. Solo tendrás que colocarlo sobre tu lente y girarlo hasta conseguir que desaparezcan y disparar tu toma.

Sin embargo, no siempre te funcionará este truco. En algunos nos casos aparecerán patrones indeseables con los que no contabas y que quizá no descubras hasta que vayas a revelar tu foto en el ordenador. Esto ocurre muchas veces porque el filtro no es de buena calidad o porque el propio cristal de la ventana ya está polarizado.

11. Apaga luces y aleja objetos brillantes

Si tu intención es hacer fotografías por la noche a través de una ventana, tendrás que aplicar algunos trucos extra. La clave para conseguir una buena toma sin reflejos, es que el interior de la estancia donde te encuentres esté lo más oscuro posible. Por eso, lo primero que haremos será apagar todas las luces.

Ahora aleja de la ventana todos aquellos objetos brillantes o de colores claros que encuentres, como pueden unas sábanas o una lámpara. No caigas en la tentación de dejar las cortinas cerradas y la cámara en medio pensando que ganarás oscuridad porque lo más probable es que se reflejen en el cristal.

12. Busca la oscuridad entorno a la lente

Como te decíamos, un entorno oscuro es indispensable para conseguir tomas perfectas y libres de reflejos. Algo que podemos hacer para conseguir más oscuridad es vestirnos con colores oscuros y evitar el color. Piensa que estarás frente a la cámara y si vistes con colores claros, estos reflejarán la luz.

Por otro lado, podemos aislar todavía más la lente de luz si usamos un parasol de goma retráctil que esté totalmente pegado al cristal. Otros fotógrafos prefieren crear un espacio de oscuridad con una ‘lens skirt’ o ‘capucha negra’. Esta práctica consiste básicamente en pegar con cinta adhesiva una tela negra al cristal dejando un hueco para nuestro objetivo y trabajar con el modo live view.

¡No hay reflejos que valgan!

¿Cuántas fotos tienes en tu galería que no te sirven porque tienen reflejos? Pues no te preocupes, porque serán las últimas. Ahora que ya sabes cómo evitarlos no tendrás ningún problema en conseguir fotografías espectaculares a través de una ventana.

Aun así, no subestimes al vidrio. Algunas técnicas te funcionarán perfectamente y a la primera en algunas ventanas y otras no. Así que ve adaptándote a cada situación y creando tus propios trucos.