Arte Cultural

12 consejos para hacer fotos en el desierto

Las fotografías de desiertos son atractivas porque son paisajes dramáticos, majestuosos y misteriosos que nos transmiten una gratificante sensación de soledad, serenidad y tranquilidad.

Para un fotógrafo puede ser una experiencia muy interesante, ya seas aficionado o veterano. El problema es que no es tan sencillo fotografiar el desierto y si no conocemos algunos detalles importantes es posible que se convierta en todo un desafío conseguir buenas fotografías en este medio.

Por eso, hemos recopilado hasta 12 recomendaciones imprescindibles que deberías conocer antes de aventurarte con tu cámara entre las interminables dunas. ¡Vamos allá!

Contenidos

#1. Aprovecha las primeras/últimas horas del día

 

Panasonic Lumix DC-G9 · 34.0mm · f/13 · 1/3200s · ISO 400

En fotografía la luz lo es todo, pero en un escenario como el desierto, las condiciones lumínicas serán especialmente importantes. Como sabes, el amanecer y el atardecer se caracterizan por mantener una posición del Sol baja. La única diferencia entre las primeras y las últimas horas del día radica en el posible viento que pueda hacer en la zona.

Si elegimos los primeros y últimos 90 minutos del día para hacer nuestras fotos o lo que conocemos también como hora dorada, lograremos mejores fotos. Esa posición del sol hará que las sombras se alarguen y conseguiremos crear la sensación de volumen que definen los surcos en la arena.

Frente al amanecer y al atardecer, las horas centrales son las menos indicadas para hacer fotos por la posición del Sol. Cuando está alto incide con un ángulo que no enfatiza las texturas ni beneficia a esa definición del volumen, por lo que no nos interesa.

 

#2. El Sol, mejor en perpendicular

Hay otro aspecto que es importante tener en cuenta sobre la posición del Sol y nuestra posición a la hora de tomar las fotos. Si nos colocamos de espaldas al Sol y este brilla directamente detrás de nosotros, nuestra escena estará completamente iluminada y plana porque no habrá sombras visibles desde esa perspectiva.

Recuerda los conceptos básicos de iluminación en fotografía y aplícalos en el desierto. Cuando la luz incide de forma lateral sobre un elemento la otra mitad se proyectará en una sombra y esto creará sensación de profundidad y de tridimensionalidad.

Si queremos que nuestras fotos tengan más volumen y sean mucho más atractivas, lo más recomendable es que nos coloquemos de forma perpendicular al sol. Esto nos ayudará a obtener contraste entre luces y sombras creando formas, texturas y patrones que ya no nos darán una imagen plana.

#3. Dispara en formato RAW

Los grandes contrastes de luz que puedes encontrar en distintas escenas pueden hacer que tengas problemas con la medición que se traduzcan en fotos con zonas subexpuestas o sobreexpuestas.

La buena noticia es que disparando en RAW tendrás alguna opción más para tratar de recuperar parte de la información de la foto.

Recuerda que si la luz es muy brillante la arena actuará como reflector y aún se intensificará más, por lo que puedes usar el botón de compensación de la exposición.

Si compensas negativamente un par de pasos (o los que sean necesarios) ayudarás a tu cámara a medir mejor la luz de la escena.

Lo mismo te pasará con el balance de blancos, que será difícil definir cuál es mejor elegir en cada momento. Así que dispara con el balance automático y espera a revelar la imagen en RAW para definir la temperatura de color que desees.

Aunque si disparas durante la hora dorada, como te hemos comentado antes, conseguirás fotografías donde la arena de las dunas brille intensamente con tonos rojos y naranjas.

#4. Usa filtros para tu lente

Además del parasol, otro accesorio habitual para proteger la lente es el conocido como filtro UV. Si no tienes otro deberías llevarlo, aunque solo sea para proteger la lente de los potentes rayos ultravioletas, de la arena y de los golpes. Sin embargo, en un escenario como el desierto lo ideal es aprovechar para utilizar un filtro polarizador.

Con un filtro como este además de proteger la lente podrás conseguir un mayor contraste entre el cielo y la tierra, lo que te permitirá enfatizar los colores.

Otro filtro interesante que te vendrá muy bien es el filtro de densidad neutra (ND) porque es capaz de reducir la intensidad de la luz que entra al sensor y permite también hacer fotografías de larga exposición diurnas sin miedo a que nuestras fotos se sobreexpongan.

Los filtros degradados de densidad neutra (GND) cuentan con una transición graduada entre una parte oscura y otra transparente. Estos filtros serán ideales para compensar el contraste entre las dunas de arena repletas de sombras sinuosas y los cielos demasiado iluminados.

#5. Aplica el bracketing de exposición

A veces el contraste será tan fuerte entre luces y sombras que será difícil conseguir una captura, incluso disparando en RAW o con filtros puestos en la lente. Cuanto mayor sea ese contraste más difícil será exponer correctamente tus fotos.

Para estos casos es aconsejable que hagas servir la técnica del bracketing u horquillado de exposición. Se trata de una práctica que nos permite obtener varias capturas de una misma toma pero con distintos grados de exposición. Puedes hacerlo de forma automática si tu cámara incluye la opción o realizar esas tomas tú mismo/a.

Manualmente, deberás hacer entre 3-6 tomas variando el nivel de exposición y utilizando el modo de disparo con prioridad a la apertura. Así que lo único que cambiará la cámara será la velocidad de obturación. Posteriormente, solo tendrás que combinar las fotos en un programa de edición. En este artículo te contamos cómo hacerlo.

#6. Incluye elementos dentro del encuadre

 

Canon EOS 5D Mark II · 24.0mm · ƒ/4.0 · 1/250s · ISO 100

Fotografiar desierto vacío puede ser atractivo si nos centramos en captar sombras o texturas, pero en cuanto a composición puede resultar algo monótono y poco interesante.

Por eso es importante que busques detalles interesantes como personas, animales, insectos, plantas o cualquier elemento que puedas incluir en el encuadre.

Coloca elementos porque además de añadir valor a la imagen y de darle vida, también nos servirá para aplicar profundidad a la toma y, sobre todo, a darle escala. Nunca podremos saber la magnitud de una duna si no tenemos como referencia un elemento cuyo tamaño nos resulte familiar.

No te centres solo en captar paisajes con un gran angular y elementos en primer término. En un desierto también hay lugar para experimentar con un teleobjetivo que comprima la perspectiva o con un objetivo macro que capte los detalles más cercanos de un cactus o de una flor del desierto. Recuerda que hay vida más allá del paisaje.

#7. Juega con las líneas rectas y curvas

 

NIKON D70 · 46.0mm · ƒ/6.3 · 1/1000s

Las dunas y los surcos en la arena formados por el viento, combinados con las sombras en función de la posición del sol, se convierten en magníficos aliados a la hora de buscar elementos compositivos que puedan agregar interés a nuestras fotos.

La combinación de estos elementos permite jugar con las líneas, las cuales son un elemento compositivo fantástico que podemos explotar en esta ocasión.

Tanto las líneas rectas como las curvas pueden dibujar formas interesantes que podrás fotografiar para obtener imágenes abstractas que parecerán incluso pinturas.

Las huellas que dejamos en la arena con nuestro paso pueden también convertirse en un elemento compositivo interesante, aportando nuevas líneas que ayuden a dirigir la mirada o que transmitan algún mensaje.

#8. Busca patrones y texturas

Una de las cosas que más te va a llamar la atención a la hora de hacer fotografías en el desierto son los patrones, el ritmo y las texturas.

El viento va moviendo la arena en diferentes direcciones y va creando líneas de arena que parecen moverse y serpentear alejándose en el horizonte.

Si sigues nuestro consejo y fotografías esos patrones de forma perpendicular al Sol, lograrás aplicarles sombras y volumen para que destaquen más en la toma.

Eso sí, busca zonas alejadas del turismo masivo para que no haya suciedad o pisadas que contaminen la arena virgen.

De igual modo que los patrones, las texturas cercanas de la arena o de la tierra resquebrajada debido a la aridez del terreno pueden ser temáticas interesantes que perseguir.

Ya lo sabes, no te centres solo en captar imágenes donde salga el cielo y las dunas y echa un vistazo al suelo que hay bajo tus pies, porque puede que te sorprenda.

#9. Cuenta una historia interesante

 

NIKON D300s · 55.0mm · ƒ/7.1 · 1/1000s · ISO 200

Además de incluir elementos en primer plano, de jugar con las líneas y de enfatizar texturas, también deberemos esforzarnos en encontrar historias que fotografiar. No dejes que la belleza de las dunas de arena acapare toda la atención y observa bien tu entorno.

Fíjate en algo inusual y diferente que pueda ser el centro de interés de tu toma. Los retratos de las personas autóctonas de la zona siempre son atractivos y exóticos cuando viajas a otros países con culturas muy distintas a la tuya.

No pierdas la oportunidad de fotografiar a un nómada del desierto, a una mujer con velo o a un vendedor de camellos.

Los objetos olvidados o abandonados, como puede ser un zapato, un sombrero o incluso una muñeca pueden convertirse también en los protagonistas de tu captura.

El minimalismo es una práctica ideal para realizar en el desierto pero busca también llenar el encuadre contando algo.

#10. Protege la cámara de la arena

 

Canon EOS-1D X Mark II · 24.0mm · ƒ/4.5 · 1/1600s · ISO 400

Hay distintos tipos de desierto pero la mayoría de estos consejos están centrados en los desiertos de arena, formados por dunas porque el viento y la arena fina es la combinación más dañina para nuestra cámara.

Procura mantenerla guardada y protegida todo el tiempo que puedas, sacándola únicamente cuando vayas a hacer las fotos.

Es esencial que evites cambiar objetivos o tarjetas de memoria. Cualquier ranura en nuestra cámara es un punto más de entrada de arena que puede dañar nuestro equipo.

Elige bien el objetivo que vayas a usar (un todoterreno que cubra muchas distancias focales, por ejemplo) y pon una tarjeta de memoria (o dos si puedes) con capacidad suficiente.

Lleva el equipo imprescindible. Si no vas a usar parte de tu equipo, mejor déjalo en casa o en un lugar seguro. No solo evitarás cargar con un peso innecesario, sino que además estará más protegido.

Hay quien recomienda incluso el uso de carcasas acuáticas para proteger las cámaras. No obstante, el uso de estas carcasas puede afectar a la calidad final de las fotos.

#11. Toma precauciones frente al calor

 

SONY ILCE-7M2 · 35.0mm · ƒ/2.8 · 1/500s · ISO 100

De igual modo que te insistimos en que protejas al máximo tu cámara, también deberás protegerte tú mismo/a. Ten en cuenta que en algunos desiertos las temperaturas pueden llegar a superar los 50ºC y eso afectará tanto a tu cámara y como a tu propia persona.

Para proteger el equipo lo principal es que no dejes que el Sol incida sobre la cámara demasiado tiempo, porque puede recalentarse. Si ves que coge mucha temperatura, envuélvela con un pañuelo o toalla fresca y seca cuando la guardes en la bolsa para que recupere su estado normal.

Evita la luz del Sol directa en las horas más calurosas y mantente hidratado/a en todo momento. Protege tu piel con ropa y/o protector solar potente, lleva gafas de sol, sombrero y un calzado adecuado. No olvides tampoco llevar un GPS para orientarte o un teléfono con el que poder comunicarte en caso de emergencia.

#12. Disfruta de la fotografía nocturna

 

NIKON D800 · 16.0mm · ƒ/4.0 · 20s · ISO 1600

El desierto es uno de los lugares más impresionantes para hacer fotografía nocturna y astrofotografía. Al no haber cables de luz que tapen el cielo ni civilización cerca tampoco habrá contaminación lumínica que estropee las vistas.

Además, las temperaturas extremas bajarán y como ya no será tan insoportable el calor podrás contemplar un cielo estrellado perfecto y hacer fotografías impresionantes, incluso de la luna.

Aprovecha justo después del atardecer para realizar algunas tomas con algo de paisaje o ilumina las dunas cercanas con una linterna.

También puedes hacer fotografías de la vía láctea (si es época de que se vea) o fotografías de larga exposición para captar la trayectoria de las estrellas.

Pero eso sí, para poder hacer nocturnas no podrás dejarte en casa ni el trípode ni es disparador remoto.

¡Aporta tu granito de arena!

Ya estás preparado/a para ir al desierto y conseguir fotografías espectaculares sin miedo a que tu equipo sufra ningún percance. Lo más importante para lograr buenas fotos en un medio tan peculiar es que seas muy creativo/a y que cuides especialmente la exposición revisando el histograma tras cada captura.

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